Luego de 10 minutos, llegamos al Hotel Plaza del Bosque, donde nos esperaban con unos refrescantes jugos de cocona heladitos. Desde ya, sabíamos que tendríamos una estadía placentera. Después de instalarnos en nuestras habitaciones, cenamos los platos más típicos de Tarapoto: chaufa regional, Así como el rico Tacacho con cecina. Sin más espera, tomamos una motocar que nos llevó a conocer la plaza, donde nos sorprendió la cantidad de comercio y lugares de cenar, beber y ocio.
Al día siguiente, desayunamos y tomamos nuevamente una moto que nos llevó a hacer un tour por el Parque Temático Chullachaqui (a 9.5km por la carretera de Yurimaguas, a 30min en moto, costo de entrada por persona 6 soles), allí nos encontramos con una galería de arte selvático y un muy peculiar guía de la zona, quien nos contó cada una de las historias y leyendas plasmadas en los cuadros de las exposiciones. Tenían muchas esculturas que representaban los mitos más conocidos en la zona y terminamos con un mini zoológico donde
pudimos conocer a una pequeña tigrilla y a una sachabaca.
Luego volvimos a la moto que nos esperaba para continuar con el recorrido hacia la catarata de Ahuashiyacu, a 15 minutos continuando la carretera Yurimaguas. La entrada tiene un costo de 6 soles por persona, está ubicado a 465 msnm, el clima es cálido, y se recorre unos 15 minutos por un camino lleno de vegetación y pequeños animales e insectos de la zona, hasta llegar a una impresionante caída de agua de 40 metros de alto. A pesar de la lluvia, decidimos entrar a nadar, el agua estaba muy refrescante y el paisaje desde allí era hermoso
para disfrutar de la naturaleza y capturar lindas fotos. Regresando al hotel era necesario descansar un poco para reponer energías y continuar con nuestra travesía.